Jaime Ramírez Pedraza (50) fue diagnosticado en enero del 2011 con Esclerosis Lateral Amiotrófica, una enfermedad degenerativa que lo fue inmovilizando de manera gradual hasta acabar con su vida la mañana del sábado 27 de octubre a causa de una asfixia, producto del descolgamiento de su mandíbula. Esto luego de haber presentado en tres oportunidades solicitudes de indulto humanitario que han sido denegadas.
“Empezó a perder fuerzas en los brazos, piernas y luego en los músculos torácicos. En la cárcel no tenía las condiciones mínimas, porque él necesitaba una terapia física o hidroterapia, algo que era imposible en el penal”, señala Carlos Ramírez, hermano del fallecido.
La primera solicitud de indulto se presentó el primer semestre del 2011 y fue firmada por el propio Jaime Ramírez Pedraza. Dicho pedido fue rechazado durante el gobierno de Alan García, esto al parecer para evitar polémicas debido a que Ramírez fue sentenciado en 1996 por el delito de terrorismo, acusado de pertenecer al MRTA.
Para noviembre del 2011, los hermanos del reo presentaron una carta solicitando un indulto humanitario al presidente Ollanta Humala, el que volvió a ser rechazado.
“Lo denegaron sin darnos motivos”, asegura Carlos Ramírez, quien agrega que este pedido fue elevado a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la cual no se pronunció sobre el caso.
Respuesta pendiente
Una tercera solicitud de indulto fue presentada hace tres meses, por lo que la respuesta aún estaba en proceso en el momento del deceso del sentenciado.
“Pero ya no importa, porque mi hermano ya falleció”, se lamenta Ramírez Pedraza, quien asegura que en el Perú no había ni una sola cárcel con las condiciones para atender a un preso en las condiciones de su hermano.
Los familiares de Jaime Ramírez se lamentan por haber presentado el indulto en tres ocasiones y no haber recibido a tiempo respuesta positiva.
“Mi hermano cumplía todo requisito para ser indultado. Incluso cuando murió, pasó porque sufría ataques de asfixia, en su desesperación por respirar se le descolgó la mandíbula y solo le vendaron la cabeza”, dice Carlos Ramírez.
Claves
- Condena. Acusado de pertenecer al MRTA, Ramírez Pedraza había cumplido ya 16 años de una condena de 25.
- Denuncia. Los familiares del fallecido aseguran que luego de sufrir el ataque de asfixia el personal médico del penal Castro Castro no lo atendió a tiempo.
Publicado en La República, el 28 de octubre de 2012